Recomiendo la visita a este museo. Entre otros motivos por sus aviones expuestos en un espacio al aire libre del museo, por sus salas dedicadas a la aviación deportiva, comercial, aeroespacial, etc. Dicha sala cuenta con un simulador de vuelo, simulador de ATC e incluso con una brillante demostración de como se lleva a cabo el control de tránsito aéreo en Suiza por parte de Skyguide. Otra parte que merece la pena del museo, al menos para mi, es la dedicada a otro apasionante mundo: el de los trenes. Con numerosos vagones y locomotoras de todos los tipos y en el que se puede ver también una maqueta de cómo transcure la línea férrea por el corazón del San Gotardo. Y como colofón a la visita de esta bella ciudad, un paseo por el puente colgante de madera (Kapellbrücke).