Qué lujazo tiene que ser estar, a horas intempestivas, admirando en el silencio de la noche un aparato así mientras el característico silvido de sus turbinas lo inunda todo.
Manuel Marin
2-26-2011 07:52:26
Lo buenos de esas noches, es que no venía sólo un Tupo, siempre se juntaba también algún IL o algún YAK.