Toda gran compañía de bandera puede "presumir" de haber fracasado en el mundo de las low cost. Los muy eficientes nórdicos tuvieron su particular truño llamado Snowflake
Snowflake fue el intento de SAS para competir con las low cost con una aerolínea aparte. Tras año y medio No consiguieron que los costes de operación fueran más bajos qeu los de la matriz por lo que el proyecto fue abandonado.