Volando junto a un gran cúmulo tormentoso sobre el Mediterráneo, el cual tuvo que ser "evitado" por los pilotos con maniobras sucesivas de virajes a izquierda y derecha, aparte de algunos frentes de turbulencia. (Nikon D50/Nikkor 18-55mm)
"De-icing" a -2 grados en el exterior. El avión durmió a la intemperie toda la noche y la escarcha en sus alas era considerable, por lo que la visita al puesto de deshielo era obligada.