Cuando se cerró Hellinikon para dar paso al nuevo aeropuerto ateniense de Venizelos se quedaron "olvidados" unos cuantos aviones en el viejo aeródromo localizado en Glyfada. Uno de ellos este One Eleven cuyo último propietario fue Hellenic Air, una compañía que nunca llegó a operar. El avión llegó a LGAT en 1992 y allí se quedó para siempre. Como nota curiosa es el único 1-11 registrado en Grecia