La bestia europea, encarándose como una veleta al viento cruzado de 16 nudos en su despegue hacia Dubai.
Esta foto está cargada de significado para mí, mucho más allá de la espectacular escena (a mi juicio) que retrata. Lógicamente no voy a enumerar todos esos significantes, pero sí comentar que me siento muy orgulloso de haber podido capturar esta toma y de poderla compartir, que es de lo que se trata a fin de cuentas.
Espero sinceramente que os guste.
Dedicada especialmente a mi compañera de aventuras, Sandra.