Llegada del Concorde a la base de Cotesmore con motivo de la celebración del festival RIAT 2000. Por una, para nosotros, elevada cantidad de libras se podía hacer un corto vuelo en este inigualable avión sobre el Atlántico.
Para mi fue un salto tecnológico en la aviación comercial comparable (o mayor) que el del De Havilland Comet, pero solo coinciden en algo paradogico: ninguno de los dos fue realmente rentable. Al menos este sigue siendo el único, ademas de el primero.