Sorpresiva visita de dos Harriers de la Armada a Alvedro.
Llegados a últimas horas de la tarde y sin más aviso que el estruendo que generan cuando vuelan lento sustentándose con los motores, estos dos veteranos -que por desgracia no pude captar juntos en una misma foto- provocaron que hasta los medios locales se hiciesen eco de su paso por Coruña.
Finalmente, tras una estancia de algunas horas y bien entrada la noche, la pareja de Harriers rodaría hasta la cabecera 21, pidiendo a torre permiso para hacer una espectacular pasada baja por la pista y perderse en el cielo nocturno envueltos en el mismo estruendo que les acompañó en su llegada.