Estacionado en Alvedro este clásico que llegó en la tarde del día anterior operando un charter futbolero con el Almería para jugar en Riazor un partido contra el Deportivo de La Coruña.
El mismo avión se encargaría en la mañana siguiente de llevar de vuelta a casa a los almerienses, que perdieron el encuentro por tres goles a uno.